sábado, 23 de julio de 2011

¿CÓMO HABLO CON MI HIJO DE SEXUALIDAD?

Esta es una pregunta que muchos papitos se hacen: ¿será necesario hablar de sexualidad con mi hijo?, ¿qué debo decirle?, ¡pero aún es muy pequeño, no va a entender nada de lo que le diga!, etc. es muy cierto que nuestro pequeño no va a entender lo que le digamos, si no utilizamos palabras que vayan de acuerdo a su edad y métodos que les facilite la adecuada  asimilación de la información.



Hablar de diferentes temas con nuestros hijos, desde una edad temprana, permite no solo formar un lazo afectivo de seguridad y confianza, sino que también le estamos brindando diferentes herramientas para que pueda enfrentar más tarde una situación problema.

Es por todo ello que aquí le brindaremos a grandes rasgos los pasos que uno puede seguir para poder informar al pequeño en este tema. Lo primero que debemos puntualizar está relacionada con la familia, desde su definición, formación, miembros hasta sus funciones como la de “brindar amor y protección”, sin dejar de lado los roles que desempeña cada uno de los integrantes dentro de la misma. Así mismo se enfatiza en que los roles no van a está en relación al sexo, sino a lo que cada uno puede desempeñar, así pues no es necesario que solo la NIÑA este en la cocina, sino que el NIÑO también puede desempañar alguna función, todo ello depende de la edad, factor muy importante en todo momento.

Luego de que el niño pueda identificarse como parte de una familia, comprendiendo que posee un rol, continuamos con su propia identificación: ¿Soy niña o soy niño?, lo primero es que puedan diferenciar las partes de su cuerpo, diferenciando incluso sus genitales, no nos avergoncemos de llamar a las cosas por su nombre, es importante, ya que si no lo hacemos, podríamos causarle alguna confusión.

Sabemos que nuestros hijos, por su naturaleza son muy “curiosos”, empiezan a explorar todo lo que hay a su alrededor, por eso no es de extrañar que esa misma curiosidad lo sientan por su propio cuerpo. Esto empieza a una edad muy temprana y es una conducta totalmente normal, ya que forma parte del desarrollo infantil. A esto se le conoce como Autoexploración Infantil, que es una etapa que todos los niños deben superar, ya que una vez que adquieran percepción de sí mismos, dejarán de tocarse. Muchos adultos, ante esta conducta, suelen reaccionar negativamente frente al niño, como retirando la mano; pudiendo ocasionar rechazo y sentimientos negativos como la culpabilidad, impidiendo que descubran sus propios cuerpos. Se diferencia de la Masturbación Infantil en el objetivo, ya que esta última busca encontrar placer sensorial mediante la manipulación de los genitales. Es importante diferenciar esta con la que se da en la adolescencia, cuyo objetivo es totalmente diferente. Recordemos que la primera fuente de placer para el niño es el pecho materno cuando lacta. Es por eso que se recomienda al padre de familia, tener una actitud relajada y lo más natural posible frente a esta conducta y no castigadora ni represiva. 

¿Pero para que es todo esto?, es para que el pequeño pueda comprender lo importante que es la seguridad personal y el cuidado de sí mismo. Aprender a identificar quienes lo pueden tocar y bajo qué circunstancias, a prender a reconocer personas extrañas de las conocidas, y a que no “debe” recibir nada de las extrañas especialmente, a que tiene derecho a su propia privacidad y lo más importante aprender a decir “NO” en situaciones específicas. Para un mejor entendimiento por parte de nuestro hijo, se hace por lo general uso de herramientas como marionetas y cuentos que uno mismo puede diseñar o que puede modificar, realizando preguntas e instigando al niño para que responda adecuadamente.